Entre los principales puntos, la propuesta establece que las empresas que facturen entre uno y cinco millones de dólares deberán pagar 0,1%, las que facturen entre cinco y 10 millones de dólares, 0,15%; las que facturen más de 10 millones, 0,2%.
En el plano fiscal, el proyecto fija un techo presupuestario para cada institución pública y disminuye la capacidad que tiene el Ejecutivo de incrementar el techo del presupuesto, que ahora es hasta un 15%, a un máximo de 5%.
El gobierno espera obtener unos 700 millones de dólares con las reformas establecidas en el proyecto, pero hasta ahora no está claro si tendrá los votos necesarios.
Daniel Mendoza, presidente de la Comisión que elaboró el informe para el primer debate, luego de concluida la sesión del jueves rechazó "que se utilice la dura situación que están atravesando las familias ecuatorianas para rechazar y criticar (…) un proyecto que, por supuesto debe ser perfeccionado"
El presidente de la Asamblea, mientras tanto dijo que no se puede poner en juego el futuro del país por "cálculos políticos".
El primer debate se retomará el 5 de noviembre.
El proyecto, que forma parte de los compromisos asumidos por Ecuador con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para incrementar los ingresos y reducir el gasto público y así acceder a un paquete de créditos por 10.200 millones de dólares con los organismos multilaterales para enfrentar la crisis económica, fue enviado a la legislatura con el carácter de económico urgente, por lo que el plazo para aprobarlo o negarlo vence el 16 de noviembre.
