"La mayoría de los flujos de trata suceden entre países cercanos, víctimas bolivianas son detectadas en países fronterizos como Argentina, Brasil, Chile, Paraguay o Perú", dijo el representante de Unodc en Bolivia, Thierry Rostan.
Rostan dijo que en la campaña Corazón Azul, impulsada por la Unodc, participan actualmente 28 países, entre ellos Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, México, Perú y Panamá, países latinoamericanos a los cuales se suma Bolivia.
"La trata es una de las más crueles manifestaciones del crimen organizado trasnacional y una de las peores violaciones de los derechos humanos", afirmó el representante de la Unodc.
Recordó que los casos de trata aumentan año tras año y que solo en 2016 se reportaron 24.000 víctimas en todo el mundo.
"A países fronterizos (víctimas bolivianas) llegan muchas veces engañadas o bajo falsas promesas de mejores condiciones de vida para ser luego utilizadas como mano de obra barata en talleres clandestinos de costura, en la siembra y cosecha de productos agrícolas o para la explotación sexual comercial en burdeles o centros clandestinos, entre otros", dijo Rostan.
Anunció que la Unodc y el Gobierno boliviano desarrollarán un plan que incluye la capacitación de funcionarios consulares y actividades de solidaridad con las víctimas.
El diplomático explicó que el símbolo del Corazón Azul representa la tristeza de quienes son víctimas de la trata de personas y recuerda, además, la insensibilidad de quienes compran y venden a otros seres humanos.