El cambio al proyecto "es un error, a mi juicio, grave y profundo", afirmó Chadwick en conferencia de prensa.
En aquella sesión, con 7 votos contra 6, los parlamentarios eliminaron la figura del proyecto original que contemplaba la expulsión de los extranjeros con antecedentes penales, y agregaron una norma que prohíbe deportarlos si es que su integridad corre peligro en su país de origen.
"Ningún extranjero podrá ser expulsado o devuelto al país donde su derecho a la vida, integridad física o a la libertad personal corran riesgo de ser vulneradas", consignó la indicación agregada por los parlamentarios de oposición.
Además: Alrededor de 125.000 extranjeros regularizaron su situación en Chile
Este 11 de julio, el ministro Chadwick aseguró que esta decisión contraviene el espíritu de la ley y señaló que "Chile, al igual que cualquier Estado, tiene el más legítimo derecho de poder expulsar de su territorio a aquellas personas extranjeras o migrantes que han ingresado faltando a la ley, no cumpliendo con los requisitos de ingreso o que puedan tener conductas delictuales".
Por último, Chadwick hizo un llamado a la oposición a que "reflexionen sobre la indicación que aprobaron" y pidió que apoyen el proyecto del Gobierno.
En junio de este año, el Gobierno inició un proceso de expulsión de extranjeros con antecedentes penales; hasta la fecha han sido deportados más de 100 migrantes y se espera que durante este año la cifra llegue hasta dos mil extranjeros expulsados.