"Creo que Saif al Islam no desempeñará ningún papel en Libia", dijo en una entrevista con la agencia Nova.
A la vez indicó que la liberación del hijo de Gadafi "tenía el objetivo de agravar la crisis libia y exacerbar aún más la división en el país".
"Los migrantes ilegales parten de los puertos de Misurata, Trípoli, Sabratha y Zuara, cuyas autoridades son respaldadas por Italia, pero tenemos un plan para acabar con ello", indicó.
El coronel aseguró que cuando el Ejército Nacional establezca el control sobre Trípoli y otros puertos de Tripolitania, el flujo de migrantes ilegales de Libia a Europa terminará.
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Al Masmari reiteró que Haftar está dispuesto a llevar sus tropas a Trípoli en los próximos seis meses tras el fin del mandato del Gobierno de unidad nacional encabezado por Fayez al Sarraj.
El 10 de junio el hijo de Gadafi fue puesto en libertad por la milicia Abu Bakr al Siddiq en virtud de la amnistía declarada por el Parlamento de Libia.
Varios días después la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) llamó a arrestar a Saif al Islam, cuyo paradero actual se desconoce.
Desde finales de marzo de 2016 en Libia funciona un Gobierno de unidad nacional apoyado por la ONU que busca acabar con la dualidad de poderes y superar la profunda crisis que estalló en 2011.
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El Gabinete en Trípoli no ha sido reconocido hasta la fecha por la Cámara de Representantes (Parlamento oficial) en Tobruk que cuenta con el apoyo del Ejército Nacional.
