El Tribunal de Casación egipcio desestimó definitivamente las acusaciones contra el expresidente Mubarak por la implicación en la muerte de manifestantes durante los disturbios de enero de 2011.
Todas las demás personas procesadas, incluido el exministro del Interior Habib al Adli, también fueron absueltas.
Mubarak y Al Adli fueron condenados a cadena perpetua en junio de 2012 al ser declarados culpables de la muerte de civiles en 2011 por el Tribunal Penal de El Cairo.
Más aquí: Al Arabiya revela plan de Gadafi de asesinar a Mubarak
En enero de 2013, el Tribunal Penal de Egipto aceptó la apelación de los abogados de Mubarak contra esa sentencia, y en noviembre de 2014 la corte de El Cairo retiró todos los cargos por la muerte de manifestantes contra el exmandatario, sus hijos, Al Adli y seis asesores de este último.
La decisión provocó el descontento popular, y la Fiscalía General presentó su recurso, alegando una serie de infracciones en el proceso.