La gasolina en Australia, en máximos de 8 años en medio de la crisis de Ucrania

MOSCÚ (Sputnik) — Las hostilidades en Ucrania y los límites de producción acordados por la alianza OPEP+ empujaron los precios de la gasolina en Australia al máximo de los últimos ocho años, según la Comisión Australiana de la Competencia y el Consumidor (ACCC, por sus siglas en inglés).

"La invasión rusa de Ucrania y la negativa del cártel de la OPEP a aumentar la producción del crudo, combinada con la recuperación de la demanda de petróleo luego de que los países relajaran sus restricciones del covid-19, impulsaron los precios de febrero, tanto para la gasolina refinada internacional como para el promedio minorista de la gasolina en las cinco ciudades más grandes de Australia, hasta el máximo de ocho años", constató la ACCC.

Los precios han subido aún más en las dos primeras semanas de marzo.

El presidente de la ACCC, Rod Sims, señaló que los precios del petróleo se habían elevado ya hacia finales de 2021 debido a las continuas acciones de la alianza OPEP+ y la persistente crisis energética en el hemisferio norte. "Los impactantes eventos en Ucrania han hecho que los precios del crudo suban aún más, ya que Rusia es un importante proveedor", agregó.

La ministra de Exteriores Marise Payne anunció el 11 de marzo que Australia prohibiría la importación del crudo, derivados del petróleo, gas y carbón desde Rusia, uniéndose al embargo impuesto previamente por Estados Unidos, Canadá y Reino Unido.

Según el diario The Guardian, Canberra no impondrá esa prohibición durante 45 días para que las dos principales refinerías locales, Viva Energy y Ampol, reciban las entregas ya pagadas del combustible.

El pasado año, Australia compró a Rusia unos 147 millones de litros del petróleo crudo, o un 1,2% del total importado.

Numerosos países condenaron la operación militar que Rusia lanzó en Ucrania el 24 de febrero pasado y activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan infligirle a la economía rusa el mayor daño posible.

Por vez primera, las sanciones incluyen la desconexión parcial de Rusia del sistema SWIFT, la inmovilización de las reservas internacionales de su Banco Central y, en el caso de países como EEUU, Canadá, Reino Unido y Australia, el embargo sobre la importación de petróleo ruso.