El documento fue suscrito por el canciller japonés Toshimitsu Motegi y la ministra de Comercio Internacional británica Liz Truss.
"Queremos que este acuerdo no solo acelere los procesos de comercio exterior e inversión entre los dos países, sino que también sea una base importante para fortalecer y desarrollar las relaciones entre Japón y el Reino Unido como socios estratégicos globales", dijo Toshimitsu Motegi tras la firma del convenio.
La conclusión del acuerdo se vio necesaria por la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
El acuerdo prevé una reducción del 94% de los aranceles sobre las importaciones británicas a Japón y una reducción del 99% de los aranceles sobre las importaciones de mercancías japoneses.
Los aranceles a las importaciones de automóviles y productos industriales japoneses se eliminarán paulatinamente para el año 2026.
En el marco del nuevo acuerdo se espera consolidar la cooperación en materia de tecnologías digitales, ciberseguridad, servicios financieros, industria automotriz y sector de consumo.
También se reducirán significativamente los aranceles a productos agrícolas como la carne de cerdo, la carne de vacuno y el salmón. Se ampliarán las exportaciones de productos alimenticios británicos a Japón, incluido el vino espumoso inglés, la ternera escocesa y el cordero galés.
Según las estimaciones del Departamento de Comercio Internacional británico, el acuerdo podría aumentar el intercambio comercial entre los dos países en 15.000 millones de libras esterlinas.