Esto fue lo que le pasó a un grupo de excursionistas que se encontraba en el Parque Nacional Glacier, Montana, para pasar un domingo por la tarde. Todo parecía perfecto: el clima, la vegetación, las montañas, hasta que otro grupo se percató que un oso iba directo a ellos.
En las imágenes, grabadas desde otra colina por otro grupo, que logró advertirles, se ve cómo el oso baja lentamente por un sendero hasta que agarra velocidad en dirección a los excursionistas.
El grupo de personas entró en pánico e hizo lo peor que se puede hacer en este caso: correr. Incluso, desde la otra colina le gritaban que hicieran ruido y no corrieran, pero una cosa es estar allí, a lo lejos, y otra saber que un tierno grizzly viene por ti.
Afortunadamente, nadie salió el herido: ni el oso ni los excursionistas.