"A pesar de que el señor Ayyash no es el único implicado, desempeñó un importante rol en la operación contra Hariri y la acusación confirmó su culpabilidad en todos los cargos que se le imputan", dijo el magistrado.
Según concretó, Ayyash fue declarado culpable de cinco delitos: conspiración para perpetrar un atentado terrorista, atentado con explosivos, asesinato premeditado de Hariri con uso de explosivos, asesinato de 21 personas e intento de asesinato de 226 personas.
Al mismo tiempo, el Tribunal Especial declaró inocentes a tres de los implicados en el caso de asesinato de Hariri.
"El tribunal resolvió declarar inocentes a Asad Sabra, Huséin Oneissi y Hasán Habib Merhi", comunicó el juez David Re.
El ex primer ministro libanés Saad Hariri, hijo de Rafik Hariri, declaró que el fallo del Tribunal Especial es justo.
"El tribunal dictó su fallo y en nombre de la familia de Rafik Hariri lo aceptamos y exigimos que se ejerza la justicia", dijo Saad Hariri a periodistas en La Haya.
Según subrayó, todos los libaneses han escuchado hoy la verdad sobre la muerte de Rafik Hariri.
En 2007 el Consejo de Seguridad de la ONU acordó crear en La Haya un tribunal especial para el Líbano.
En 2011 se dieron a conocer los nombres de los cuatro principales sospechosos, relacionados con Hizbulá: Mustafa Amine Badreddine, Asad Sabra, Huséin Oneissi y Salim Ayyash.
El líder del movimiento chií libanés Hizbulá, Hasán Nasralá, se negó a colaborar con la justicia internacional y afirmó que el objetivo del Tribunal Especial de La Haya consiste en denigrar el movimiento chií y "atizar el odio interconfesional entre los chiíes y sunníes en el Líbano".
Además, dijo que el Tribunal Especial era un "instrumento de Estados Unidos y de Israel".
