"Abogamos por el cese inmediato de las hostilidades y el comienzo de un diálogo político sobre la solución del conflicto en Libia y la formación de organismos gubernamentales libios comunes sobre la base de las resoluciones y decisiones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU y de la Conferencia Internacional de Berlín", dijo Bogdánov en una entrevista con el periódico egipcio Al Ahram.
Agregó que "desafortunadamente, el alto el fuego duró poco y se reanudaron las hostilidades".
"Continuaremos presionando a Ankara para que influya en el Gobierno de Fayez Sarraj. Al mismo tiempo, estamos trabajando con los estadounidenses, los europeos y los principales países de la región", puntualizó.
El Parlamento libio que sesiona en Tobruk (este) declaró el 14 de julio que el Ejército de Egipto tiene derecho a intervenir en el conflicto libio para defender la seguridad nacional de Libia y Egipto si ve una amenaza inminente para la seguridad de los dos países.
El 9 de julio el Ejército egipcio realizó maniobras en el oeste de Egipto, cerca de la frontera con Libia. Los ejercicios, bautizados Hasm 2020, movilizaron fuerzas armadas de todo tipo.
El presidente egipcio afirmó a finales de junio que una intervención de Egipto en Libia sería legítima conforme a la Carta de las Naciones Unidas.
Además, Sisi declaró que su país está dispuesto a ayudar a las tribus libias en su lucha contra la injerencia externa, entrenando y armándolas.
Actualmente en Libia hay una dualidad de poderes:
- el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del Ejército Nacional Libio liderado por el mariscal Jalifa Haftar,
- el Gobierno de Acuerdo Nacional, encabezado por Fayez Sarraj, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.
