El shock anafiláctico, o edema de Quincke, es la reacción alérgica más grave que existe. Cuando ocurre, un hinchazón en la garganta y las vías respiratorias corta el suministro del aire, y la víctima acaba sofocada. Zvonkóv destacó que hay determinados alimentos que son más propensos a provocarlo como regla general.
"Los alérgenos más potentes son el cacahuete, el chocolate, las gambas, la proteína del pescado y de la leche, los productos químicos para el hogar, los perfumes o los aditivos aromatizantes", declaró Leonid Zvonkov para el medio ruso Vacherniaya Moskva.
Según informa el especialista, es muy común que las personas no sepan que son alérgicas a los productos que les pueden desencadenar esta fuerte reacción, de manera que no es posible protegerse del shock de antemano. No obstante, Zvonkov destaca que existen inyectadoras cargadas con adrenalina, que puede usar el propio paciente y que le pueden salvar la vida.
"Una persona puede tomar aspirina durante toda su vida, pero al usar las pastilla número 101 le puede causar un shock anafiláctico. En la comida pudo haber una sustancia, a la que la joven era alérgica, y ella no lo sabía", explicó el paramédico.
También añadió que la reacción alérgica no depende de la cantidad de comida consumida y que incluso un pequeño trocito puede causar el edema de Quincke. Lo peor de todo es que prácticamente cualquier sustancia puede causarla y es algo individual, por lo cual es casi imposible prevenirlo. "Si no se tienen fármacos hormonales a mano, no hay manera de salvar a la persona", concluyó.
Y es que ante estas situaciones la reacción debe ser rápida y las ambulancias no siempre llegan a tiempo, ya que puede matar a una persona en cuestión de minutos.