"No queremos causar polémicas, pero si alguien piensa cerrarnos la puerta en la cara, contestaremos", afirmó Di Maio.
En sus palabras, las negociaciones sobre el asunto empezarán después del 3 de junio, cuando expira la prohibición de viajes desde y hacia Italia, impuesta por el Roma en marzo para frenar la propagación del coronavirus.
El canciller reiteró que el Ejecutivo italiano se siente preocupado por la idea de algunos países de la UE de crear corredores turísticos para asegurar flujos de turistas entre países donde se observan medidas rígidas de distanciamiento social, con el fin de contener posibles nuevos brotes de infección con el COVID-19.
En cuanto a la reciente decisión de Grecia de prohibir la entrada en su territorio a los turistas provenientes de las regiones italianas más afectadas por la pandemia del coronavirus, Di Maio comunicó que discutirá la cuestión con su homólogo helénico el próximo 9 de junio, durante su visita a Atenas.
Italia sigue siendo uno de los países más afectados por la pandemia del coronavirus, con 232.997 casos de contagio registrados, entre ellos 33.415 fallecidos y 157.507 recuperados.