El Escuadrón de Pruebas y Evaluación altamente clasificado núm. 4477 de EEUU existió oficialmente desde el 1 de abril de 1977 hasta el 4 de marzo de 1988. Durante ese tiempo, la unidad tuvo a su disposición los MiG-17, los MiG-21, los MiG-23 y sus análogos chinos. Miles de tripulaciones estadounidenses entrenaron en el combate aéreo contra estas aeronaves soviéticas.
El proyecto estaba ubicado en el pequeño aeródromo de pruebas de Tonopa, en Nevada.
"Nuestra misión era entrenar a los pilotos de caza para derrotar a los MiG rusos. Era un programa altamente secreto", dijo Manclark a Sputnik.
Según el coronel, durante los diez años de existencia del escuadrón se llevaron a cabo 16.000 vuelos y se entrenaron 7.000 tripulaciones.
Manklark hizo 301 vuelos en el MiG-21, casi todos en combates aéreos de imitación. Las excepciones fueron cuatro vuelos para estudiar el control.
De acuerdo con el coronel, no había descripciones en ninguno de los interruptores de los aviones rusos. Solo los había en las copias chinas.
"En el MiG-21, usaba solo ocho interruptores. Todos los demás interruptores... no tenía ni idea de para qué servían y no los toqué", recordó.
Aunque Manklark reconoció que tenían algunos manuales de control.
"Teníamos un par de manuales que nos entregaron los espías. Podías ver imágenes de sus manos en las fotos".
Otro problema era encontrar piezas de repuesto para los MiG.
"Necesitábamos motores para el MiG-23. Los manejaba General Electric. Los reparaban, ponían nuevas cuchillas resistentes al calor y otras cosas", comentó el interlocutor de la agencia.
El entrenamiento de batallas en los MiG les costó vida a varios pilotos estadounidenses. Uno se estrelló en un MiG-17 en 1979. Otro, en un MiG-23 en 1982 se evacuó en el último momento, pero no sobrevivió.
Según el coronel, durante diez años solo hubo dos víctimas mortales, aunque se conoce otro caso: en 1984, el MiG-23 se estrelló con el coronel general Robert Bond a bordo.
En la actualidad, en la base aérea Nellis, se realizan regularmente grandes ejercicios de Bandera Roja (Red Flag, en inglés), que simulan los enfrentamientos aéreos con el enemigo. Este año supuestamente se celebraron tres ejercicios de este tipo. Y fue en esta base donde se estrelló un Su-27 en 2017 que mató al piloto más experimentado, el teniente coronel Eric Schultz.
Según AviationWeek.com, dirigió el escuadrón de Red Hats. No tiene número y últimamente vuela en los MiG-29 y los Su-27P rusos. Los medios lo califican como descendiente directo del escuadrón dirigido por Manklark.