La interlocutora dijo que en la práctica el clima y los incendios nunca se convierten en un motivo para cancelar el viaje.
"Estos fenómenos naturales se repiten cada año, la gente no reacciona ante ellos y no afectan el mercado turístico", dijo Tiúrina.
En cuanto a los viajes comprados, "ni los incendios, ni el calor, ni el frío sirven de motivo para anular los tours ya que el tiempo está cambiando muy rápidamente", aseguró.
"Además, si el viaje se cancela por mal tiempo o incendios, el operador turístico actuará estrictamente de acuerdo con el contrato: cuanto más cerca esté la fecha de salida, mayor será la multa, que puede alcanzar el 100%. ¿Qué turista lo quiere?", finalizó Tiúrina.
Los bomberos aún no pueden controlar un gran incendio en la isla española de Gran Canaria, que ya ha destruido 1.500 hectáreas del bosque.