"Italia (...) está convencida de que las sanciones no son un objetivo en sí mismo, sino una herramienta para resolver la crisis ucraniana", declaró el jefe de la diplomacia italiana en la reunión previa al Consejo Europeo, convocado los días 20 y 21 de junio en Bruselas.
Roma tiene por objetivo cooperar con sus socios europeos para "aliviar la tensión" y "sentarse a la mesa de negociaciones", explicó Conte ante la Cámara de Diputados.
Mientras, el presidente de la Cámara de Comercio Italiano-Rusa, Vincenzo Trani, comunicó en entrevista con Sputnik que Italia pierde 3.000 millones de euros al año y Europa ya perdió 250.000 empleos por las sanciones de los países occidentales contra Rusia.
Desde entonces, EEUU, la Unión Europea y otros países aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia.
Rusia subrayó en reiteradas ocasiones que no es parte del conflicto en Ucrania y reafirmó que la reincorporación de Crimea se llevó a cabo en pleno respeto de la legislación internacional y de la Carta de la ONU.