El récord impuesto por este joven de 20 años dejó boquiabiertos a los asistentes del evento en el hotel Don Florencio de la ciudad espirituana de Yayabo. Según un reporte de Cubadebate, Castellano demostró toda su agilidad y rapidez al momento del récord sin ni siquiera cortarse con el filoso material.
Esta peculiar afición surgió cuando Castellano cursaba la escuela secundaria. Animado por sus amigos, quienes se alarmaron con su elasticidad, el joven comenzó a aplastar las latas para mostrar cómo podía sacar sus omóplatos.
Según contó al medio local, hace más de un año practica esta disciplina, que es su verdadera pasión. "Entreno todos los días en mi casa. Soy capaz de doblar los hombros, las rodillas, los dedos de las manos y los pies hasta posiciones que muchas personas me dicen que es casi imposible que no se partan", mencionó en un vídeo publicado en su página de Facebook.
Castellano estudia también en una facultad obrera campesina para culminar sus estudios en la enseñanza media. Pero ha inclinado su vocación profesional por esta capacidad de hipermovilidad en las articulaciones y ligamentos que también presentan contorsionistas, bailarines y atletas.
Aunque, por ahora, aplastar el mayor número de latas con la espalda en menos tiempo puede ser la meta más cercana.
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