Los manifestantes fueron desde la plaza Habima, donde se proyectó el lema "Netanyahu, Israel está avergonzado" sobre un edificio, hasta la sede del Likud, el partido que encabeza Netanyahu. Los asistentes gritaron consignas contra el primer ministro como "Corrupto, vete a casa", según informó el diario The Jerusalem Post.
"Netanyahu tendría que haber abierto su discurso con dos palabras: "Yo dimito", indicó la diputada del partido Meretz (de izquierdas) Michal Rozin ante los manifestantes.
El fiscal general, Avichai Mandelblit, anunció su intención de imputar a Netanyahu por cohecho, fraude y abuso de confianza en tres casos de corrupción. La acusación formal está pendiente de una vista.