"Tenemos que encontrar una solución ideal que consiste en volver a la mesa de las negociaciones para terminar la guerra (…) necesitamos un diálogo internacional que ayude a solucionar los problemas de seguridad en conformidad con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU", dijo en la apertura de la conferencia de donantes para Yemen que se celebra en Ginebra.
Majlafi destacó que el Gobierno yemení apoya los esfuerzos del nuevo enviado especial de la ONU para el país, Martin Griffiths, y está dispuesto a prestarle la colaboración necesaria.
Los combates se recrudecieron a principios de diciembre pasado, cuando los rebeldes hutíes acusaron de traición a sus aliados en la lucha contra el Gobierno y mataron al expresidente Alí Abdalá Salé, quien había instado a luchar contra los insurgentes.
Según la ONU, al menos 10.000 personas han muerto y más de 50.000 han resultado heridas en la guerra yemení.
The people of #Yemen are facing the world's largest humanitarian crisis. 75% of the population are hungry, sick and in desperate need of humanitarian assistance.
— UN Refugee Agency (@Refugees) 3 апреля 2018 г.
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