Según la estadística, uno de cada tres habitantes de Estados Unidos experimenta falta de sueño. Un 31% de hombres y un 45% de mujeres entre los encuestados tampoco están satisfechos con su vida sexual.
La investigadora afirma que se trata no de una relación, sino de un verdadero 'círculo vicioso'. Así, el buen sexo afecta positivamente al sueño. Al mismo tiempo, el sexo malo repercute negativamente en el sueño, mientras que el sueño malo reduce el deseo sexual.
Cabe destacar que ambos problemas tienen la misma causa: el estrés, según señala Mintz.
Para demostrar la fiabilidad de su hipótesis, la psicóloga precisa que una hora extra de sueño permitió mejorar la vida sexual de un 14% de las mujeres encuestadas. El texto completo del estudio está disponible en The Conversation.
Más información: Disipan mitos populares sobre el sexo
La investigadora indica que tener un horario regular del sueño es beneficioso para que tanto las mujeres como los hombres mejoren su vida sexual.