"(La llegada de inmigrantes) está impactando en nuestra sanidad, en la educación, en la seguridad, en todos los servicios públicos de nuestro estado (…) ese gran impacto, junto con la deuda que heredamos de la gestión anterior, requiere que el Gobierno federal preste una atención especial a Roraima", expresó la gobernadora, según recoge un canal oficial de noticias de su Gobierno.
Roraima tiene frontera con Venezuela y es la principal puerta de entrada de ciudadanos de ese país a Brasil; en los últimos meses el flujo creció con fuerza y a día de hoy la situación se desbordó en puntos como la capital, Boa Vista, donde hay más de 40.000 venezolanos asentados en las calles, sin apenas comida y en busca de trabajo.
El Gobierno de Roraima realiza desde hace tiempo peticiones de auxilio al Gobierno central y uno de los senadores que representa a este estado, Romero Jucá, llegó a afirmar que el Ejecutivo se estaba planteando cerrar temporalmente la frontera para hacer un censo exhaustivo de los inmigrantes.
Lea más: Los cancilleres de Brasil y de Colombia aseguran "puertas abiertas" a refugiados venezolanos
Sin embargo, en los últimos días tanto el ministro de Relaciones Exteriores Aloysio Nunes como el propio presidente Michel Temer remarcaron que la frontera seguirá abierta.