"Pedimos a las autoridades que retiren los cargos de sedición presentados contra Jordi Sánchez y Jordi Cuixart y que pongan fin de inmediato a su prisión provisional", afirmó Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España, según consta en un comunicado emitido por la organización.
Según la jueza que decretó su encarcelamiento, ambos pudieron incurrir en un delito de sedición por su papel de convocantes y promotores de las protestas del 20 y 21 de septiembre en Barcelona contra la operación policial desarrollada para evitar el referéndum independentista del 1 de octubre.
En opinión de la magistrada, las protestas intentaron obstaculizar una operación policial de manera tumultuaria como parte de una estrategia superior cuyo único fin es declarar la independencia de Cataluña.
"Si bien convocar a manifestantes con el fin de impedir una operación policial lícita puede ser perseguido por considerarse una alteración de orden público, la presentación de cargos contra Jordi Sánchez y Jordi Cuixart por un delito grave como es la sedición y su prisión provisional constituyen restricciones excesivas de su derecho a la libertad de expresión y de reunión pacífica", afirma el comunicado de Amnistía Internacional.
Además, la organización recuerda que Sánchez y Cuixart no animaron a los manifestantes a utilizar la violencia, por lo que los daños causados a unos vehículos de policía durante las concentraciones "no deberían atribuírseles de manera directa ni indirecta".
