"Para entender mejor la situación, necesitamos no solo estadísticas, sino también historias humanas… Que sean contadas sus historias, que sean revelados sus rostros humanos", señaló Tagle, citado por el canal de televisión ABS-CBN, en una pastoral leída durante la misa dominical a lo largo del país.
"El asunto de las drogas ilegales no debe reducirse a un problema político o criminal, es una cuestión humanitaria que nos afecta a todos", añadió.
El arzobispo hizo este llamamiento tras una drástica escalada de redadas antidroga que se saldaron con la muerte de más de 90 personas en una semana, incluyendo 32 en la provincia de Bulacán, en la región de Luzón Central.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, elogió la operación de Bulacán y alentó a los agentes a "matar a unos 32 todos los días".
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Desde el 1 de julio de 2016, la policía y otros cuerpos de seguridad filipinos llevaron a cabo casi 61.600 operaciones antidrogas, que resultaron en la detención de más de 82.600 personas y en la muerte de más de 3.450, según los datos correspondientes al 26 de julio de 2017.