"Ambos coincidimos en que en este último mes la violencia en Siria disminuyó de una manera muy significativa, incluyendo en las zonas de seguridad", dijo De Mistura a la prensa.
Además, continúo, tanto él como el ministro ruso comparten la opinión de que la distensión debe ir acompañada de un trabajo activo en el desminado, la asistencia humanitaria a la población y la liberación de presos.
"Por supuesto, expresamos la esperanza de que el proceso negociador en Astaná continúe; sé que la próxima reunión en Astaná fue aplazada, pero espero que tenga lugar", manifestó, agregando que las consultas de Astaná son "útiles y necesarias para ambas partes" (Gobierno y oposición).
En lo que va del año se han celebrado varias reuniones sobre Siria en Astaná, impulsadas por Rusia y Turquía.
Uno de los principales resultados del último encuentro en la capital kazaja, que tuvo lugar el 3 y 4 de mayo, fue la firma de un memorando sobre la creación de cuatro zonas de seguridad en Siria, país que vive desde hace más de seis años una guerra civil en la que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas.
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La próxima reunión de Astaná estaba programada para el 12 y 13 de junio, pero la Cancillería de Kazajistán informó que se posterga.
