"Moscú condena rotundamente semejantes atentados terroristas (…) La nueva serie de atentados confirma una vez más la necesidad de acciones coordinadas en la lucha contra el terrorismo", dijo a la prensa.
En la mañana del miércoles 7 de junio, un grupo de personas armadas abrieron fuego en la sede del Parlamento iraní en Teherán.
Otro ataque se perpetró contra el mausoleo del imán Ruholá Jomeiní, entre los agresores había una mujer que hizo explotar su cinturón explosivo.
Según los últimos datos del Ministerio de Justicia de Irán, los dos ataques se saldaron con al menos 12 muertos y 39 heridos.