"No debemos olvidar que los 250.000 millones que gastan los países europeos para su propia defensa es una suma desmesurada que supera el conjunto de los gastos militares de Rusia y China, y si los países de la UE y Canadá cumplen con los objetivos fijados en Varsovia, el presupuesto militar (de la OTAN) crecerá en 100.000 millones más", dijo en la Conferencia de Seguridad de Moscú.
Durante la cumbre de la OTAN celebrada en julio de 2016 en Varsovia, la Alianza aprobó un incremento sin precedentes de su presencia militar en el este de Europa al decidir emplazar cuatro batallones multinacionales —de 600 a 1.000 militares cada uno— en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia.
La OTAN explica que el envío de los batallones se debe a la "preocupación por las acciones agresivas de Rusia".
Paralelamente, la OTAN sigue desplegando armas antimisiles de EEUU en Europa.
El Pentágono está construyendo otra instalación similar con radares y misiles interceptores en la localidad polaca de Redzikowo, a unos 180 kilómetros del enclave ruso de Kaliningrado.
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Moscú sostiene que el despliegue de estos contingentes cerca de su frontera supone una amenaza a su seguridad, además de ser medidas provocativas que carecen de fundamento real, al no existir acción agresiva alguna por parte de Rusia.