"En realidad, Estados Unidos es cómplice del terrorismo internacional y solo hace que el terrorismo cobre fuerzas, una postura irresponsable que traerá serias consecuencias", dijo Feoktístov al intervenir ante la Organización de los Estados Americanos (OEA).
"El ataque desestabiliza la situación en Siria y en la región, anula las posibilidades de cooperación ruso-estadounidense en el proceso político en el país árabe y además hace imposible la cooperación antiterrorista entre Moscú y Washington", indicó Feoktístov.
Tras el ataque murieron 15 personas, seis militares y nueve civiles de la localidad de Shairat, situada cerca del aeródromo.
El ataque supone una represalia al supuesto uso de armas químicas en la ciudad siria de Jan Sheihun del que Washington culpa a Damasco que, a su vez, niega toda implicación en los hechos.
Un corresponsal de Sputnik comunicó desde el lugar de los hechos que varias aeronaves, incluidos cinco cazas, quedaron intactos y que la pista de aterrizaje tampoco sufrió muchos daños.