"Se ha iniciado otro expediente penal por los nuevos bombardeos a los civiles en Donbás que se produjeron entre el 3 y 10 de marzo de 2017", dijo la portavoz de la entidad, Svetlana Petrenko.
La ofensiva militar ucraniana destruyó más de 50 edificios residenciales y otros recintos en las ciudades de Donetsk, Dokuchaevsk, Górlovka y las localidades adyacentes.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), con observadores presentes en el terreno, denunció también que el periodo entre el 3 y el 10 de marzo fue la tercera semana más violenta desde 2016.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia.
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Las hostilidades han dejado más de 10.000 muertos y 22.700 heridos, según estimaciones de la ONU.