El canciller ruso explicó que se trata de "los bandos sirios, que son el Gobierno y los numerosos opositores, las Fuerzas Aeroespaciales rusas, Hizbulá, apoyada por los vecinos iraníes, la coalición encabezada por EEUU".
"La prioridad principal es eliminar el foco del terrorismo, lo que une a todos los que se empeñan en normalizar la situación en Siria, por lo menos, así declararon todos los actores externos", agregó Lavrov.
Resaltó que en esta coordinación es importante tomar en consideración al Gobierno sirio y las Fuerzas Armadas sirias, ya que todos los actores internacionales deben respetar la soberanía y la integridad territorial de Siria.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición, a las que Occidente denomina "rebeldes moderados".
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El Ejército sirio hace frente también a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autoproclamado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas proscritas en Rusia y otros países.
Según los datos de la ONU, entre 300.000 y 400.000 personas perdieron la vida en el conflicto.