"Aún no están en los cajeros automáticos, y no sabemos cuándo podrán ser dispensados por esa vía, por ahora los distribuiremos en las taquillas (cajas) de los bancos", informó la trabajadora de una entidad financiera pública al suroeste de Caracas.
Sin embargo, el presidente Nicolás Maduro aseguró el mismo lunes algunos bancos ya estaba haciendo la distribución del billete a través de cajeros electrónicos y explicó que se hará de forma progresiva.
Tal como indicó el director del Banco Central de Venezuela, José Khan, los billetes que se encuentran en circulación son los de 500, 5.000 y 20.000 bolívares (0,73; 7,3 y 29 dólares, respectivamente), tres de los seis que integran el nuevo esquema monetario.
A estos deben sumarse los billetes de 1.000, 2.000 y 10.000 bolívares (1,4; 2,9; 14,7 dólares), los cuales, informó el Banco Central servirán para facilitar los medios de pago en efectivo.
El nuevo cono monetario debió comenzar a circular a mediados de diciembre, sin embargo, se demoró por un supuesto "sabotaje" impulsado por el Departamento del Tesoro de Estado Unidos, denunció el presidente Maduro.
"Por fin los estamos viendo, yo dudaba que los entregaran hoy (lunes), pero pienso que eran necesarios", dijo uno de los usuarios tras recibir cuatro billetes de 5.000 bolívares.
Para María De Abreu la entrada en circulación de los nuevos billetes "facilitan el traslado de dinero en efectivo".
"Yo soy jubilada, y mi hijo es comerciante, por los dos lados resulto beneficiada, porque cuando cobre la pensión me darán menos billetes y es más seguro, y algunas veces hago el depósito de efectivo de mi hijo, y espero ya no necesitar un bolso para traer el dinero al banco", expresó.
El billete de 100 saldrá de circulación el próximo 20 de febrero, anunció el presidente el domingo 15 de este mes, en lo que fue la tercera prórroga.
El jefe de Estado decidió retirar este billete del mercado el pasado mes de diciembre, luego de una investigación en la que se reveló que estaba siendo extraído del país, y depositado en almacenes de América Latina, Europa y Asia, para "asfixiar la economía" del país suramericano.
