A sus 87 años, He Wenxun, un habitante de esta provincia china, se personó en la comandancia militar local y declaró que ya no podía llevar a cabo su misión debido a su avanzada edad. Los militares se quedaron sorprendidos al entender que aquel anciano había protegido y vigilado durante 41 años un refugio antiaéreo olvidado, informa Gbtimes.com.
Un campesino chino se pasa 41 años vigilando un refugio antiaéreo secreto https://t.co/TZNJlbIT03 pic.twitter.com/1IfkE0jeip
— ABC Internacional (@abc_mundo) 5 января 2017 г.
El hombre informó de que, en 1975, los militares locales le hicieron responsable de la construcción de un refugio antiaéreo secreto, por lo tanto —durante décadas— el hombre nunca reveló, ni siquiera a su familia, qué hacía durante las noches.
He Wenxun construyó su casa justo encima de la instalación militar y cada noche veló por que estuviera ordenada y limpia. Al envejecer, sus familiares le pidieron que se fuera a vivir con ellos para que pudieran cuidar de él, pero se negó a abandonar su misión y solo al alcanzar los 87 años pidió que lo cambiaran por otro 'guardián'.
El mando militar chino permitió oficialmente al veterano que se retirara, le agradeció su disciplina y lo nombró 'Persona de moral elevada'.
La historia de este militar recuerda a la del japonés Hiro Onoda, un oficial de inteligencia que siguió 'luchando' escondido en las selvas filipinas, durante más de 29 años tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, antes de rendirse.
Más recientemente, una familia vietnamita volvió a la civilización tras haber permanecido escondida durante 40 años en la jungla, escapando de la guerra entre EEUU y Vietnam.