"Para nosotros, [el 29 de noviembre] más que festejo es un día de luto", explicó a Sputnik la presidenta de la Federación de Entidades Argentino-Palestinas, Tilda Rabi. A su juicio, ser solidario con el pueblo palestino hoy significa "recibir el llamado que está haciendo Palestina con respecto al fin de la ocupación, al fin de la colonización y la limpieza étnica".
Rabi también resaltó la importancia del llamado de boicot por parte de "más de 160 organizaciones" de la sociedad civil palestina. Actualmente, hay una convocatoria específica de boicot contra la empresa de productos de informática Hewlett Packard (HP). "Ellos producen computadoras y sistemas de información que son utilizados en contra del pueblo palestino", afirmó Pedro Charbel, coordinador de campañas para América Latina del Comité Nacional Palestino del Movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS).
"Hacen los sistemas que son utilizados para reforzar el bloqueo en la franja de Gaza, están en los puntos de control, participan en los sistemas y equipos de las prisiones donde hay miles de palestinos cautivos, incluyendo niños. HP es un ejemplo de la complicidad internacional y de los vínculos que empresas de todo el mundo tienen con las violaciones de Israel. Entonces si uno plantea la solidaridad con el pueblo palestino hay que escucharlo", agregó el experto brasileño, quien también investiga la temática de migración, asilo y habitación en la Universidad de San Pablo (USP), en Brasil.
De acuerdo al internacionalista, la estrategia ha demostrado su impacto en la medida que distintas empresas han anunciado su salida del mercado israelí, además de leyes y presupuestos impulsados por Israel para combatir la iniciativa. "La mayor prueba que tenemos de que el movimiento es efectivo son los esfuerzos israelíes para frenarlo", evaluó.
"Dado que los estamentos superiores desde la comunidad internacional, dígase Naciones Unidas u otros, hasta ahora se han ido más en declaraciones que en sanciones concretas a un Estado ocupante, creemos que los pueblos ayudan en solidaridad sumándose al reclamo del pueblo palestino", consideró Rabi.
"Existir en Palestina significa resistir. Si estamos hablando de solidaridad con Palestina hay que tener una solidaridad eficaz no solo a nivel retórico", observó Charbel.