"El hecho de que Donald Trump haya sido elegido presidente de los Estados Unidos puede permitir que otros países decidan colaborar más con China debido a sus políticas aislacionistas", explicó Bueno, consultado por esta agencia con motivo de la breve visita a España que realiza este 24 de noviembre el presidente chino Xi Jinping.
Este experto considera que España podría ser un actor relevante a la hora de llevar a cabo esa "profundización de las alianzas estratégicas" porque las relaciones entre Madrid y Pekín son "muy buenas en el plano político".
Según explicó Bueno, los chinos "siguen recordando que España fue el primer país europeo que restableció las relaciones con China en 1989 tras el incidente de Tianamenn".
Además, el hecho de que los países de la Unión Europea no tengan "ningún contencioso geopolítico con China" propicia que haya un escenario favorable a "tener un diálogo político a mayor nivel".
En cuanto a las relaciones bilaterales entre España y China, Bueno considera que Madrid aún tiene "mucho margen de mejora" en lo que se refiere al terreno comercial.
Bueno destacó que "dos tercios del balance comercial negativo de España corresponden a la relación con China" y que las exportaciones hacia el país asiático "siguen aumentando" pero "a un ritmo más lento que en Alemania, Francia o Italia".
"El gran desafío es dar un paso mayor y ponernos a la altura de nuestros vecinos europeos", sentenció Bueno.
En opinión de este experto las relaciones entre Madrid y Pekín "se quedan en un notable cuando podrían ser un sobresaliente".
Más aquí: Canciller brasileño: Trump y el Brexit estimulan el acuerdo UE-Mercosur
Sin embargo, Bueno destaca que el vacío que puede dejar a nivel de relaciones internacionales la actitud aislacionista de Trump abre la puerta a que España ejerza un papel más importante en el plano internacional, sobre todo como catalizador del diálogo entre China y la Unión Europea.