La una restauración que costará a los contribuyentes británicos más de 369 millones de libras esterlinas (459 millones de dólares), precisó.
La soberana residirá en el palacio durante las obras que incluirán el cambio de viejos cables eléctricos, de las calderas y las tuberías.
Los gastos se cubrirán con la subvención soberana, que el Gobierno asigna anualmente a la Monarquía.
La renovación permitirá que el palacio cumpla con sus funciones hasta el año 2067, dijo el jefe de la Casa Real, Tony Johnstone-Burt.
"Asumimos toda la responsabilidad por recibir fondos públicos y estamos convencidos de que al hacer esta inversión en el Palacio de Buckingham, evitamos costos mayores y un derrumbe catastrófico en los próximos años", explicó.
El Palacio de Buckingham es la residencia oficial de los monarcas británicos desde 1837.