"El tema de las relaciones entre Irán y Arabia Saudí es muy difícil y tiene muchos aspectos y niveles", dijo Ózerov en una entrevista con RIA Novosti.
Agregó que "en este caso Rusia actúa como una fuerza dispuesta a emprender esfuerzos para bajar el grado de tensión entre los dos países".
"La aguda situación de tensión entre los dos países afecta a la estabilidad regional y todo lo que sucede en la región", mencionó.
A su juicio, "Rusia como un país que aboga con firmeza por restablecer la estabilidad en Oriente Próximo se muestra preocupada en estos momentos por el agudo enfrentamiento entre estos dos países".
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Arabia Saudí rompió relaciones diplomáticas con Irán después de que los manifestantes que protestaban por la ejecución en los primeros días de 2016 del clérigo chií Nimr Baqir al Nimr atacaran su Embajada en Teherán y su consulado en Mashhad.