Según los datos de la autoridad electoral moldava, con el 99,04% de las papeletas escrutadas, el candidato socialista Igor Dodon consigue el 48,4% de los sufragios, frente al 38,27% de su contrincante principal, la candidata de centroderecha Maia Sandu (Partido Acción y Solidaridad).
En junio de 2014, Moldavia firmó el Acuerdo de Asociación con la UE que más tarde fue ratificado por el Parlamento.
En respuesta, Rusia restringió algunas importaciones agroalimentarias del país, y luego impuso una serie de aranceles adicionales, provocando pérdidas al sector agrícola de Moldavia.
Las encuestas señalan que el rumbo europeísta se hace cada vez menos popular entre los moldavos de a pie.
Durante la campaña, Dodon prometió conseguir lo más pronto posible el regreso de los productos moldavos al mercado ruso.
"Restauraré los vínculos amistosos con Rusia e impulsaré la elaboración y la firma de un acuerdo de asociación estratégica con Rusia que abarque la colaboración económica, social y política", aseguró.
Sandu, a su vez, aboga por continuar el camino proeuropeo de la república y, en opinión de algunos politólogos moldavos, cuenta con el apoyo de EEUU donde se graduó de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy en 2010, y donde ejerció como asesora del director ejecutivo del Banco Mundial, en Washington en 2010-2012.