Según la BBC, son varias las razones por las que Daesh —organización terrorista proscrita en Rusia y otros países— e Israel mantienen por ahora las distancias entre el uno y el otro.
El primer factor es el geográfico, explicó Shlomo Brom, investigador del Instituto para los Estudios de la Seguridad Nacional de Israel, a BBC Mundo. Los territorios bajo control de Daesh se encuentran lejos de las fronteras de Israel, con excepción de los Altos del Golán, controlados por una organización fiel a los extremistas.
"Por tanto, no hay forma de que el EI haga daño a Israel sin tener una frontera común", añadió.
En palabras de otro experto, Daesh "tiene recursos muy limitados y está muy centrado en combatir tanto el control del régimen sirio en la zona como a otros grupos como el Frente Al Nusra [organización terrorista proscrita en Rusia y otros países]", señaló Ofer Zalzberg, analista del International Crisis Group en Jerusalén, al mismo medio.
"Israel no es una prioridad. De hecho, se acercaron a la frontera de Israel para protegerse de los ataques del Gobierno sirio porque Asad fue muy cuidadoso en su ataque por temor a que salpicara a Israel y eso pudiera desestabilizar las cosas", añadió.
"En Israel estamos en un entorno diferente al de Europa. La base social de la que [Daesh] podría reclutar miembros es mucho más pequeña en Israel y aquí está compuesta casi exclusivamente por palestinos", explicó a BBC el analista palestino Mouin Rabbani. "Es diferente de Francia, por ejemplo, donde hay una mezcla de nacionalidades".
"Si se mira a los palestinos, incluidos los palestinos en Israel, ellos ya tienen una causa identificable y un proyecto nacional. Y como conjunto es menos probable que se involucren en esa causa transnacional que Europa o EEUU", añadió.
"Teológicamente, no solo Hamás, sino también los Hermanos Musulmanes, critican al EI y al revés, porque a su juicio defienden una interpretación errónea del islam", señaló Zalzberg.
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Un último factor, es que la guerra en Siria no es un conflicto que le interese a Israel, que no es amigo ni de Daesh, ni del régimen sirio, razón por la cual se mantiene, mientras su territorio se encuentre a salvo, en una posición neutral. Todavía más teniendo en cuenta la situación en los Altos del Golán, territorio ocupado por Israel, pero reclamado por Damasco.
"Se puede decir que la prioridad de Israel en el conflicto sirio es que el régimen se debilite, pero también que Siria, como sociedad, como Estado y como capacidad militar se debiliten", asegura Rabbani.
Por parte de Daesh, la inacción con respecto a Israel también se debe a que no es uno de los objetivos prioritarios en su lucha.
Daesh "tiene un frente principal que es Siria e Irak, y un segundo espacio que es tratar de poner un pie en países altamente inestables como Libia y realizar o promocionar atentados terroristas que lleven su marca", declaró Mariano Aguirre, director del Centro Noruego para la Resolución de Conflictos, a BBC Mundo.
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"No tiene sentido militar para ellos enfrentarse a un enemigo muy poderoso en la región como es Israel", añadió.
Daesh, entonces, tiene como prioridad consolidar y expandir los territorios bajo su control, y su enemigo número uno son los regímenes de aquellas regiones donde se encuentra.
