"No habrá una salida acelerada ni unilateral", dijo en una conferencia del Partido Conservador.
May recordó que la decisión de activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa sobre la membresía en la UE está bajo jurisdicción del Gobierno y no del Parlamento y advirtió que los enemigos de Brexit no podrán frenar ni cesar el trámite.
"Quiero afirmar que no se podrá frenar el proceso de cumplir la voluntad del pueblo, declarada en el referéndum de junio, los poderes de activar los mecanismos del artículo 50 no pertenecen a la Cámara de los Lores ni a la de los Comunes, sino al Gobierno, el Parlamento expresó su opinión al aprobar la ley de celebrar un referéndum", dijo.
Señaló también que las relaciones de Londres con Bruselas tras abandonar la Unión Europea no serán semejantes al modelo de Suiza y Noruega.
Subrayó que tampoco se trata de un proceso "suave" ni "rudo", "Brexit es Brexit".
Noruega no es miembro de la UE, sin embargo, está integrada en la Unión como miembro de la Asociación Europea de Libre Comercio; Suiza tiene varios acuerdos bilaterales con la UE en distintos ámbitos, y acepta que algunas leyes de la UE estén vigentes en su territorio.
A finales de junio pasado, Reino Unido celebró un referéndum sobre la permanencia en la UE, en el que el 51,9 por ciento de los británicos (17,4 millones) votó a favor del Brexit.