El sábado, los terroristas detonaron un coche bomba en el centro de Homs, causando al menos 22 muertos y 140 heridos, según fuentes de un hospital local.
La Cancillería de Siria envió cartas al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y al Consejo de Seguridad de la organización, en las que señaló que el silencio de la comunidad mundial ante el atentado de Homs favorece a los yihadistas.