En un mensaje televisado a la nación, la presidenta comenzó su discurso agradeciendo "en nombre de todos los argentinos" al ministro de Economía Axel Kicillof y al de Relaciones Exteriores Héctor Timerman sus gestiones para la lograr la aprobación de la resolución de Naciones Unidas que adopta los principios para los procesos de reestructuración de deuda.
La jefa de Estado añadió que "a raíz de una iniciativa nuestra que encontró una pronta acogida en el G-77 más China, hace un año comenzó a elaborarse este proceso que culmina hoy con esta exitosa votación de los principios básicos que van a regir la reestructuración de la deuda soberana de todos los países del mundo".
Después de comentar esos principios y de ilustrarlos con algunos ejemplos de la experiencia argentina, la mandataria agradeció a los 136 países que respaldaron la resolución de la ONU y también a los que se habían abstenido.
"Sabemos de las presiones y de las necesidades", concedió.
La presidenta celebró a su vez que Argentina haya cumplido como miembro de la comunidad internacional, "ayudando a países hermanos a que no pasen por las mismas tragedias e injusticias que tuvimos que atravesar nosotros, los argentinos".
Por último, Cristina Fernández pidió a sus compatriotas que se sintieran orgullosos, y señaló que habían peleado por llevar este proceso a cabo.
Los principios aprobados por la Asamblea fueron presentados en julio por el Comité sobre Procesos de Reestructuración de Deuda de la ONU tras más de medio año de trabajo coordinado entre economistas y analistas internacionales.
Los nueve postulados que dan marco a un sistema legal global para los procesos de reestructuraciones de deudas soberanas son los de soberanía, buena fe, transparencia, imparcialidad, tratamiento equitativo, inmunidad soberana, legitimidad, sostenibilidad y reestructuración de la mayoría.
Además de los 136 votos a favor en la Asamblea, 41 países se abstuvieron y otros 6 votaron en contra (Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Canadá, Japón e Israel).