Anteriormente trascendió que el fiscal general de Egipto, Hisham Brakat, solicitó oficialmente a Interpol y a las autoridades de Alemania la extradición de Mansur.
Los periodistas alemanes cuestionan la legalidad de la causa abierta contra Mansur en Egipto y temen que en su patria el periodista pueda ser condenado a muerte.
"Solo por esa razón Alemania no puede entregar al reconocido periodista a las autoridades de Egipto", declaró el presidente de la Unión en una entrevista a Koelner Stadt-Anzeiger.
La Unión también llamó a las autoridades judiciales de Berlín y al Gobierno de Alemania a explicar cuanto antes los motivos de la detención de Mansur.
El tribunal del Cairo anteriormente condenó en ausencia a Mansur, quien tiene las ciudadanías egipcia y británica, a 15 años de prisión, por la supuesta tortura de un abogado en la plaza Tahrir, en el centro del Cairo, durante las protestas de 2011.
Al Jazeera declaró que su periodista era inocente y califico esta causa como un intento de los tribunales egipcios de obligar a callar a los periodistas.