El general recordó el 21 de julio que la única justificación para la presencia de los militares estadounidenses en Siria es la lucha antiterrorista. Por eso Washington rechaza cesar sus operaciones a pesar de las protestas de Damasco. Sin embargo, Raymond A. Thomas está muy consciente de que la situación puede cambiar.
"Pronto llegará el día cuando los rusos digan: '¿por qué sigue EEUU en Siria?' Ya están muy cerca de preguntar eso. Aunque teníamos toda la razón para entrar en Siria, si los rusos deciden jugar esta carta cuando nos queramos quedar, no podremos hacerlo. Ellos sí que podrán hacerlo", resaltó Thomas en un foro sobre la seguridad, realizado en la ciudad de Aspen, estado de Colorado.
Por su parte, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, en una entrevista con NBC News afirmó que no se oponía a las bases norteamericanas en Siria, sino que ellas deben ser construidas de acuerdo con un permiso y respetando la legalidad.
Asimismo, Lavrov señaló que una vez que los grupos terroristas en Siria sean derrotados, el país será liberado y se alcanzará un acuerdo que satisfaga a todos los grupos étnicos y religiosos. Pero la presencia posterior de bases militares extranjeras se definirá vía legal solo por las autoridades de Damasco.
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