Desde Estados Unidos, el jugador rosarino reconoció su dolor por haber fallado uno de los lanzamientos en la tanda final de penaltis que fue definitorio en la victoria del país trasandino.
"Es increíble pero no se da, evidentemente tiene que ser así. Hoy nos pasó otra vez, y otra vez a los penales", lamentó cabizbajo a su salida del vestuario.
Messi, que rompió a llorar tras el partido, recordó que es la cuarta final que pierde con la selección. La primera fue durante la Copa América de 2007. Luego llegaron tres derrotas consecutivas que también sufrió el gran ídolo junto con el resto del equipo: el Mundial de 2014, y las Copas Américas de 2015 y 2016.
"Ya son cuatro finales que me toca perder, que nos toca perder; la verdad que es una lástima pero tiene que ser así, nos e da y lo intentamos, lo buscamos, ya está", afirmó Messi.
"No es para mí, lamentablemente lo busqué, era lo que más deseaba, no se me dio pero creo que ya está", sostuvo.
Messi, principal foco de críticas o de elogios en cada partido, recordó que mucha gente quizás estaba esperando su salida, después de haber decepcionado a tantos seguidores que vuelcan en él la responsabilidad de cada enfrentamiento.
Consultado sobre si se trataba de una decisión definitiva, el jugador manifestó que creía que sí, aunque ante una insistencia del periodista que le consultaba, volvió a cabecear un "ya está" antes de retirarse.