"La votación de EEUU y Ucrania [en la ONU] en contra de la resolución [contra la glorificación del nazismo] propuesta por Rusia se enmarca en la estrategia de estos dos Estados, que consiste en usar las fuerzas neonazis y de extrema derecha en sus propios intereses políticos", dijo Pátrushev.
Subrayó que esta estrategia se hizo patente ya durante el golpe de Estado ucraniano de 2014 apoyado por Washington.
"Es obvio que Washington está interesado en mantener a Poroshenko como jefe de Estado por un segundo mandato, y está dispuesto a pasar por alto sus vínculos con los personajes neonazis ucranianos más infames", destacó el secretario del organismo de seguridad ruso.
El funcionario señaló que el apoyo de EEUU permite que Poroshenko se atreva a cualquier acto provocador, también en la frontera ruso-ucraniana, por tanto, advirtió Pátrushev, se debe esperar nuevas provocaciones de Kiev en el futuro próximo.
Tema relacionado: Senador ruso: EEUU incita a Ucrania a una provocación militar en el estrecho de Kerch
Además, según el general ruso, resulta obvio que en Europa puede surgir próximamente una "unión neonazi".
"Esto se debe ante todo al revisionismo de los resultados reconocidos de la Segunda Guerra Mundial por algunos países occidentales", advirtió Pátrushev, al señalar que el revisionismo histórico "se utiliza, entre otras cosas, para atizar los ánimos rusófobos y la propaganda antirrusa".
Pátrushev apuntó al mismo tiempo a que muchos países apoyan a Rusia en su percepción del peligro de que resurja el nazismo, entre ellos Israel "a cuyos ciudadanos no hace falta recordarles los horrores del nazismo".