Europa sin gas
"Siempre hemos dicho que suministraremos a Europa tanto gas cuanto sea necesario. Tenemos reservas probadas, tenemos transporte, estamos construyendo nuevas rutas logísticas. Si Europa declara sus necesidades y está dispuesta a firmar los contratos necesarios, no descarto que haga falta realizar nuevos proyectos de transporte de gas: Nord Stream 3, por ejemplo", señaló Alexandr Medvédev.
Teniendo en cuenta las agudas discusiones políticas entorno al Nord Stream 2, este tipo de declaraciones parecen, cuando menos, prematuras, opina Maxim Rubchenko, columnista de Sputnik. Pero muy pronto la demanda de gas ruso en Europa crecerá drásticamente debido a la reducción de su propia producción.
En marzo, el primer ministro neerlandés, Mark Rutte, anunció que el desarrollo del yacimiento de Groninga continuará a un nivel mínimo hasta 2022, y habrá cesado por completo para 2030.
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Al mismo tiempo, la demanda de gas en Europa en los próximos cinco años aumentará debido al cierre de antiguas centrales eléctricas de carbón, plantas de energía nuclear en Alemania y Francia, así como un mayor consumo por parte de las empresas industriales. Por lo tanto, la construcción de otro Nord Stream puede ser relevante dentro de tres o cuatro años, pronostica Rubchenko.
Adiós al tránsito
Gazprom pone la mira en una nueva tubería en el contexto de la crisis de tránsito del combustible azul a través de Ucrania. El actual contrato de suministro y tránsito entre la empresa rusa y la ucraniana Naftogaz expira en 2019. Alexandr Medvédev subrayó que no se prolongará "bajo ninguna circunstancia".
Sin embargo, cuando este periodo termine, "Ucrania deberá justificar el atractivo económico del tránsito a través de su territorio" para firmar un nuevo contrato, destacó Medvédev. Y no será nada fácil para Kiev.
En primer lugar, el suministro de gas a Europa desde nuevos yacimientos de la península de Yamal a través de los Nord Stream es mucho más rentable que a través de Ucrania, porque la ruta del norte es más corta: 3.200 km hasta el norte de Alemania en lugar de 4.700 km hasta el sur de Alemania.
La 'poco agradable' noticia para Ucrania a propósito del Nord Stream 2 https://t.co/r1klFDqNJJ
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 28 de marzo de 2018
Según los expertos de Mott MacDonald, para mantener la operación de los gasoductos se requieren urgentemente unas inversiones de 4.800 millones de dólares. Y para una reconstrucción total hacen falta unos 9.000 millones de dólares. Para comparar, la construcción de Nord Stream 2 costará a Gazprom 8.000 millones de dólares.
Chantaje y amenazas del Kiev enfadado
Si Ucrania ofrece tarifas adecuadas que tengan en cuenta el estado técnico del sistema de transporte de gas, y la longitud de la ruta de transporte, Gazprom estará dispuesto a seguir el tránsito de gas de 10.000 a 15.000 millones de metros cúbicos por año después de 2019.
Como siempre, Ucrania intenta conseguir lo suyo por medio de chantaje y amenazas, señala el columnista Maxim Rubchenko. El 13 de abril, el jefe del departamento comercial de Naftogaz, Yuri Vitrenko, anunció que si no se llega a "un acuerdo aceptable para mantener los volúmenes de transporte de combustible después de 2019", Ucrania puede aumentar los aranceles para el tránsito de gas a través de su territorio a finales de este año. Vitrenko explicó que de esta manera Naftogaz compensaría parcialmente las pérdidas por "depreciación del sistema de transporte de gas de Ucrania" debido al cese del tránsito ruso.
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"Hacemos llegar esta idea especialmente a los políticos europeos, que deben entender no solo las consecuencias económicas para Ucrania, sino también las consecuencias geopolíticas para todo el mundo", subrayó.
El diputado de la Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania, Antón Geráschenko, por su parte, señaló al mismo canal que es necesario "preservar la dependencia de Rusia de Kiev en el tránsito de gas". Según el político, para evitar que Rusia se niegue a transportar combustible a través del territorio de Ucrania, Kiev se dirigió a EEUU con una solicitud de amenazar a Moscú con nuevas sanciones.