"Las conversaciones están en marcha; después que la parte estadounidense tenga sus propias naves tripuladas, se estudia la posibilidad de vuelos de intercambio con tripulaciones conjuntas tanto en las naves rusas como las estadounidenses", indicó.
Según el funcionario ruso, "esto podría ser un buen seguro mutuo".
"Tenemos previsto también continuar nuestro trabajo conjunto también en las órbitas bajas terrestres, respecto al futuro de la EEI veremos diversas variantes y elegiremos la más efectiva", añadió.
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Krikalev indicó que en el marco de los planes de EEUU de "hundir" la EEI, Rusia declaró la posibilidad de convertir el segmento ruso en una estación independiente.
"Si EEUU toma la decisión de hundir la estación, entonces, claro está, se tomarán algunas medidas de nuestra parte, sin embargo, todavía no hay una decisión al respecto, ni nuestra parte ni la estadounidense se ponen como tarea reducir la cooperación", concluyó.
Rusia no planea separar su segmento de la Estación Espacial Internacional (EEI), agregó el director general de la corporación espacial rusa Roscosmos, Ígor Komarov.