Además, las recientes detenciones de un grupo de presuntos terroristas en Brasil fomentan los temores de que exista un peligro real de atentado durante el mayor evento deportivo del planeta.
De hecho, los radicales ya han recurrido activamente a las redes sociales para tratar de reclutar nuevos seguidores en el país latinoamericano.
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La tercera pieza del 'puzzle' es el macabro interés de los terroristas por las armas de destrucción masiva, como las armas químicas ya empleadas en Irak y Siria y, algo más preocupante, el elevado interés que ya han mostrado por hacerse con materiales nucleares, según el medio.
La combinación de todos estos factores indica que existe la probabilidad de que se produzca un ataque semejante, aunque la publicación señala que por el momento no se tiene constancia de que los radicales posean los materiales necesarios para producir este tipo de armas.
En este sentido, la situación que se da en las instalaciones nucleares de los países de la antigua URSS inquieta a Mirror, que tacha el nivel de seguridad de este tipo de recintos como "escaso".