Según explica la dueña de Cubby, hace algún tiempo empezó a notar marcas de dientes en algunos de sus alimentos, y más que nada, en los aguacates. De hecho, incluso ahora los tiene que esconder de su mascota.
En el vídeo, decidió llevar a cabo un experimento para demostrar que efectivamente a Cubby le gustan los aguacates. La reacción del gato ante esta fruta muestra inequívocamente que le encanta comerla.
Tanto, que incluso intenta arrancársela de las manos a su dueña.