A pesar de que David Dixon grabó estas imágenes cerca de la costa sudafricana en 2016, el vídeo volvió a ganar popularidad entre los usuarios de Instagram, donde acumuló más de 250.000 reproducciones en tan solo tres días.
En las imágenes se ve cómo el gran depredador muerde la jaula a escasos centímetros del buzo.
Instantes después, el gran tiburón blanco decide que la jaula no es lo bastante sabrosa y pierde interés por la presa. A medida que se aleja se puede apreciar la efectividad de su camuflaje: estando a pocos metros de la jaula es difícil distinguir a este gigantesco escualo.
Los enormes dientes del tiburón causaron una fuerte impresión en algunos de los usuarios de Instagram. "A mí me habría dado un ataque al corazón", dijo Kayla Davis. Otros se quedaron asombrados con la valentía del autor del vídeo: "¿Cuánto valor hace falta para hacer eso? Es tan aterrador…", expresó Henry Hartford.
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