Las dos serpientes se enredaron en medio de la habitación de los dueños de la casa. Por suerte, aquel día no había ningún invitado y sí tenían una cámara a mano para grabar las impresionantes imágenes.
Al ver lo que estaba ocurriendo, los propietarios del inmueble llamaron a una empresa especializada en la captura de serpientes. Los empleados trasladaron a los reptiles al campo.
De acuerdo con la especialista Lana Field, se trata de dos pitones machos de 1,75 metros de largo. Las serpientes se vieron envueltas en una pelea de las que suele proseguir hasta su total agotamiento y puede durar horas.
¿Cuál fue el motivo de la violenta lucha? Una serpiente hembra. Field explicó que los machos que siguen el rastro de una pitón hembra a menudo intentan probar quién es el más fuerte para 'seducir' así a la pareja.
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