El vehículo le ha costado poco más de 2.000 dólares hasta ahora.
En su vida cotidiana, Ramos Santos es auxiliar de peluquero y tiene 23 años. Construyó esta réplica de Ferrari gracias a la chatarra del motor de una motocicleta de 200 centímetros cúbicos. Las otras partes las sacó de un Ford Del Rey, un Gol y un Fusca.
La placa —matrícula— del auto tiene el nombre Italia y la identificación G2017V. La 'G' es de Geovane y la 'V' de Vanessa, la esposa del joven.